Ahora es imprescindible estar estresado, angustiado, preocupado y demás en esta vida citadina. Muchas veces sentimos que el mundo está contra nosotros cuando las cosas no te están saliendo bien, buscamos echar la culpa a otros que sin deberla ni temerla terminan recibiendo las consecuencias de nuestro sentir, o de plano no nos sentimos aptos para enfrentar el problema y decidimos darnos por vencidos…
Con esta idea comenzaré mi relato, tuve una semana muy pesada tanto en mis asuntos escolares como los personales y de paso espirituales, mi mente estaba tan enfocada en “tratar de resolver” lo que día a día se me presentaba que me olvidé de integrar esa parte espiritual que todos tenemos. Llegó el momento en que física y espiritualmente me sentí derrotada, estaba a punto de tirar todo por la borda, desaparecer y olvidarme por un momento de la razón de mi existencia en este mundo; no sé si fue coincidencia o realmente fue una señal (yo lo consideré así)… de regreso a casa me subí al metro, justo enfrente de mí se sentó un niño de unos 5 años tenía la misma mirada de cansancio al igual que yo, pasaron unos instantes para que me percatará que el niño padecía cáncer, se me vinieron muchas cosas a la mente, a su corta edad y luchando contra esa enfermedad!!
Me sentí tan impotente de mi misma, el mensaje era claro… ¿y tú de qué te quejas? Estas sana, tu mundo exterior está lleno de colores de vida, de gente que día a día te ofrece algo nuevo, una sonrisa, un abrazo o quizá un gesto de aprecio, un sin fin de experiencias nuevas te esperan cada vez que abres los ojos y créame que eso ya es un gran regalo!!
Los problemas nunca desaparecerán pero si de algo estamos dotados… es de la inteligencia con la que podemos ir desvaneciendo los problemas que nos aquejan, sin embargo, a veces no hacemos uso de ella. La imagen de aquel niño con su mamá es algo que difícilmente podré olvidar, ambos cansados, probablemente de una larga estancia en algún hospital, con la fe en lo más alto esperando un futuro más próspero. Pienso que pueden salir muchas hipótesis lo importante de este hecho es cómo lo reflejo en mi vida, cómo es que hay alguien que te esta “echando ojo” que no estás SOL@”. ¿SEÑAL O COINCIDENCIA? Ustedes juzguen…
Soy Perla Xochitl de los Ángeles Salazar, tengo 22 años, estudiante de nivel licenciatura, enseñanza de idiomas extranjeros. Parte de mi tiempo lo invierto en cuestiones de interés personal, pertenezco a la Sociedad de San Vicente de Paúl porque comparto el carisma de los Vicentinos, es lo mejor que me ha pasado!! Soy muy alegre, amiguera, vivo y disfruto cada día al máximo.
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